🏖️ Manual de supervivencia para padres en verano: lo que nadie te cuenta (pero tú sí sospechabas)

¡Bienvenid@s al segundo capítulo de nuestro blog! Si el primero te hizo sentir identificad@, prepárate para este. Hoy traemos un tema que quema más que la arena de la playa a las 3 de la tarde: ser padre o madre en verano. Y no, no hablamos de esas vacaciones de Pinterest con cabañas de madera, niños sonrientes y desayunos en calma... hablamos de la vida real. Esa en la que tus hijos creen que eres socorrista, animador, cocinero, chofer, fontanero y Google Maps al mismo tiempo. Spoiler: no hay medalla al final. 🏅❌

🧠 1. El “estoy aburrido” más temido

En invierno te quejabas porque no paraban. En verano… también. Pero ahora sin colegio. Y con más energía. ¿Cómo puede alguien tan pequeño tener tanta pila? ¿Es legal encender la tele a las 8:00 am con un “shhh, mami necesita café”? ☕ Sí. Totalmente. Recomendable incluso.

🍽️ 2. Comidas cada 20 minutos

Desayuno. Segundo desayuno. Almuerzo. Tentempié. Comida. Merienda. Merienda II. Cena. Post-cena. Todo en 10 horas. 🕙 Spoiler: tu nevera no está lista para este ritmo. Ni tu paciencia. 🥴

🏊♂️ 3. Piscina = deporte de alto riesgo

Parece divertido... hasta que estás sacando arena del bañador durante 3 días o persigues a tu criatura en modo velociraptor con manguitos. Y lo peor: que no se quieren ir. Jamás. Nunca. Aunque estén morados y tiritando. 🦖❄️